A Dios damos gracias por Susan Schaeffer Macaulay, quien a fines del siglo XX, y buscando una educación diferente para su hija, se encontró con una escuela Charlotte Mason en Inglaterra y, de paso, descubrió la obra magistral de Charlotte Mason, hecho que la inspiró a escribir For the Children’s Sake en 1984. Posteriormente, cuando el matrimonio misionero compuesto por Dean y Karen Andreola, de Estados Unidos, conoció la obra en Inglaterra (la cual había estado fuera de publicación por más de 80 años), resolvió publicarla en Estados Unidos hacia fines de la década de 1980. Como dicen por ahí, «el resto es historia» y hoy el movimiento educativo Charlotte Mason en Estados Unidos cuenta con un sinfín de referentes experimentados y padres dedicados que producen excelente material educativo acorde a la obra magistral.

Desde Estados Unidos, la obra en inglés de Charlotte Mason ha llegado a educadores hispanohablantes, como Silvia Cachia, educadora española residente en Estados Unidos quien tradujo Geografía Elemental de Charlotte Mason y la obra De Mente a Mente de Karen Glass; y Nat Leighton de Charlotte Mason Online en Australia.

A mediados de 2019 nos propusimos buscar toda la información posible en español para compartirla con los educadores de habla hispana, y hemos experimentado desde entonces un crecimiento explosivo de educadores interesados o practicantes de la pedagogía Charlotte Mason (especialmente debido a la pandemia mundial del Covid el año 2020). ¡Dios planificando todo!

Hasta ahora, ha sido nuestro honor compartir lo que sabemos de la pedagogía Charlotte Mason en inglés con cientos de padres educadores hispanohablantes. Hoy existe una red de trabajo y referentes hispanohablantes de la pedagogía Charlotte Mason de toda Iberoamérica. ¡A Dios sea la gloria!

«La educación es ambiente»

• La educación no ocurre dentro de un horario establecido, y dentro de cuatro paredes solamente, sino que se da constantemente. El niño debiera primeramente vivir en un hogar en que se propiece el aprendizaje constante de una manera natural y orgánica, con adultos y niños deleitándose por aprender variadas cosas, y darse también en todo lugar de la vida de un niño, ya sea adentro o afuera, y en el transcurso de las tareas normales del hogar y de la vida.
• Los niños menores de 9 años debieran pasar por lo menos 4 a 6 horas al aire libre, en el campo ojala. Si eso no fuera posible, los educadores encontrarán la manera de llevar al niño a la naturaleza cualquiera sea ésta para que el niño pase tiempo allí jugando, observando, aprendiendo a reconocer los elementos básicos naturales de su entorno. Es ideal si la madre va con los niños.
• Los niños debieran practicar en forma rutinaria actividades que sirven de apoyo a la familia, las cuales pueden aprenderse como una «manualidad» que tiene una utilidad práctica, y no es solo un pasatiempo sin sentido. Por ejemplo, coser y remendar, cocinar y hornear, lavar, limpiar, jardinear, reparaciones, tarjetería para agradecer o invitar, trabajo en madera, tejidos, etc., por supuesto, todo en la medida de la edad y habilidad del niño.

«La educación es disciplina»

• La formación de hábitos es fundamental en una educación Charlotte Mason. Los niños menores de 9 años tendrán como objetivo primordial de su educación la formación de hábitos básicos como la obediencia a sus padres, la atención, la excelencia, la reflexión, la imaginación, la limpieza, el orden, la cortesía, la modestia, la decencia, la devoción a Dios, entre muchos otros)
• Las clases son breves, es decir, de 10 a 30 minutos según el nivel educativo, lo cual facilita la dedicación del estudiante, y se van extendiendo en función del estudiante y sus capacidades de atención y concentración.

«La educación es vida»

• Los niños leerán «libros vivientes», es decir, literatura de alta calidad literaria, que vivifique el espíritu y no que provea meros datos. La Biblia es el «libro viviente» por excelencia.
• Las asignaturas que usarán libros vivientes son: Historia, Geografía, Cs. Naturales, Cívica, Lenguaje.
• Al usar libros vivientes, se narran después de una lectura (la narración se inicia gradualmente en el 1er año de educación formal, alrededor de los 6 o 7 años).
• El estudio de la aritmética y las matemáticas se da en la práctica con hechos fácilmente relacionables para los estudiantes, en forma oral primero y escrita después, y evitando los meros datos o repeticiones. Por lo mismo, se puede enseñar sin materiales ni programas costosos sino con todo lo que ya existe en el hogar.
• El niño tiene un acceso constante al arte y a las obras artísticas de alto valor en áreas tan variadas como la poesía, la pintura (estudio del arte), y la música (estudio de compositores, himnos, canciones tradiciones y folclóricas, así como práctica de un instrumento musical).
• Parte de incentivar al ciudadano del mundo consiste en familiarizar al niño con idiomas extranjeros de países cercanos a él, de una manera natural y orgánica y oral primero, tal como aprendió su lengua materna. El niño puede aprender varios idiomas y también incluir latín en sus estudios después del 4° año de estudio.